Como cada año, los miles de asistentes al festival más importante de Norteamérica, Coachella, hicieron que el evento comenzara con el pié derecho.Desde las dos de la tarde todo en Indio, California se tornó ajetreado, gracias a los miles de automóviles que desfilaron hacia el estacionamiento gratuito del Empire Polo Field, donde Coachella 2008 se inauguró este viernes 24 de abril.
Muchas bandas importantes aterrizaron en cada uno de los cinco escenarios, desde la banda mexicana Porter, que regresó a un escenario después de algunos meses de no hacerlo y parece que todo estuvo bien con su presentación. Por otro lado, los neoyorquinos de Vampire Weekend dejaron en claro por qué están siendo una de las bandas del momento, con su característico sonido lleno de tintes de ska, reggae y un rock muy cláico... su presentación lució con mucha gente.
The Breeders, banda comandada por la también Pixie, Kim Deal, han regresado no sólo con su disco 'Mountain Battles', sino también con una presentación llena de buenas canciones difíciles de olvidar como "Divine Hammer".
Por su parte Battles, volvió a deglutir sonidos por medio de su vocalista Tyondal Braxton, que parece no lograr ninguna palabra, pero gracias al enorme espectro musical que tienen, lograron prender a la audiencia.
The Raconteurs sólidos como una buea banda que llevara muchos años en escena, dieron el punto y aparte en su presentación en el Coachella Stage, gracias aese rock puramente retro.
Ya entrada la noche llegaron desde el Reino Unido los recientemente reunidos (aunque suene a pleonasmo) The Verve, que gracias al encanto cuasi oscuro de su vocalista Richard Ashcroft, pusieron a más de uno a recordar los ya aparentemente lejanos 90. "Bittersweet Simphony" terminó de redondear la noche del retorno de The Verve.
Los originarios de Atlanta, Black Lips, ensuciaron con su rock rudimentario las bocinas del Mojave Stage, dejando en claro que e estos momentos suenan mejor en el disco que en vivo.
Goldfrapp... qué decir de este dueto que cada vez provoca más sensaciones intensas y delicadas gracias a su hermosa y talentosa vocalista Allison, quien emocionó a todos los reunidos en su presentación.
Jack Johnson cerrando el escenario principal de Coachella, trató de demostrar que su designación como headliner este año no era obra de la casualidad sino de su calidad; grandes arreglos ideales para una lunada fría en Indio.
Y lo que caletó de nueva cuenta a los coachelleros, fue sin lugar a dudas Fatboy Slim, que no termina de divertir a la gente con sus excelentes mezclas, que nos llevaron por uno y cada uno de sus éxitos, desde un remix a "Praise You", pasando por un recuerdo a Cypress Hill con "Jump Around", y enalteciendo al himno de Arcade Fire: "No Cars Go", en una versión épica que sin duda hizo derramar alguna lágrima.
Si alguien no tenía pensado ir al Zero Fest a realizarse en la ciudad de Guadalajara, deberían ir comprando su boleto porque lo que seguramente hará Fatboy Slim, tiene que ver con el gran cierre que le ha dado al primer día de Coachella 2008.
Sebastian
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